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Adecuar sistemas a reconversión costará más de $ 300 millones

Los costos de la llamada reconversión monetaria, proceso que se iniciará el 1 de enero de 2008, sobrepasarán los 300 millones de dólares. Ese día a las 9:00 am José Pérez, aún aletargado por los festejos de la noche de año nuevo, se dirige al cajero automático en el centro comercial próximo a su casa para aprovisionarse de efectivo. Sabe que cuenta con un saldo ligeramente superior a los 100.000 bolívares y se dispone a retirar la máxima cantidad posible.

En el primer intento, una advertencia de "saldo insuficiente" lo alarma, y el aviso del cajero automático le recuerda especificar el monto a retirar en bolívares fuertes. Con desazón coloca 100 en el campo destinado a la cantidad y pulsa la tecla de aceptación. La máquina, para sorpresa de Pérez, le dispensa dos billetes de 50.000 bolívares y un comprobante en el que se especifica el monto retirado: 100 bolívares fuertes. La comisión es de 5 Bs F y el saldo disponible 0,53 Bs F. En el comprobante aparece una leyenda: "Este cajero dispensa efectivo en bolívares o en bolívares fuertes, de acuerdo con la disponibilidad".

Procesos y logística.

La escena anterior encaja entre los escenarios probables de la transición de los bolívares actuales al bolívar fuerte.

Los mecanismos de distribución normalmente utilizados por el Banco Central –cinco centros para la entrega de efectivo a los bancos en todo el país–, así como la logística de cada entidad financiera para recargar sus cajeros automáticos con los nuevos billetes, no serán suficientes para garantizar la disponibilidad total de la nueva moneda en los primeros días del año.

Rodolfo Gasparri, vicepresidente de tecnología del Banco Mercantil, señaló que, al lado de los aspectos relacionados con la adecuación de los sistemas informáticos, se requiere un esfuerzo de entrenamiento de los cajeros y demás empleados que atienden al público en las agencias bancarias, así como de los analistas de crédito y de riesgo operacional.

"Los archivos históricos de transacciones quedan almacenados con los montos expresados en bolívares actuales, pero se requiere alguna modalidad de conversión a bolívares fuertes de esos archivos, pues esas transacciones son usadas por los sistemas de detección de fraude y por los sistemas de evaluación de riesgo para la concesión de créditos".

Una vez que se dé la transición, apuntó Gasparri, aumentarán considerablemente las transacciones de consulta de cuentas a través de cajeros automáticos, servicios de atención telefónica, páginas web y en las propias oficinas.

"Los clientes querrán constatar los nuevos montos de sus cuentas y seguramente chequearán sus saldos antes y después de una transacción por cajero automático o vía web. Esta presión adicional sobre los sistemas se registrará a partir de enero de 2008 y luego bajará gradualmente", señaló.

Recursos limitados. Edward Jaramillo, coordinador en IBM de Venezuela de las propuestas de consultoría y asistencia a los clientes en materia de la conversión, advirtió que a poco más de seis meses de la fecha prevista para la entrada en circulación del bolívar fuerte, las organizaciones deben actuar con agilidad, en vista de que a medida que avanzan los días los recursos disponibles en el país en el área de asesoría, programadores para la remediación de los sistemas o incluso recursos de infraestructura se hacen cada vez más escasos.

Jaramillo afirmó que IBM dispone de una metodología integral tanto para el análisis de impacto de la conversión monetaria en las redes como en el proceso de remediación y los controles de calidad de los sistemas convertidos.

Refuerzo indio. El Grupo OpenCrom es otra de las empresas que ofrece servicios de consultoría y de adecuación de sistemas para el proceso de conversión al bolívar fuerte. Su vicepresidente, Pedro Pablo Ojanguren, explicó que el equipo realizará localmente la asesoría y el diagnóstico de los sistemas en asociación con la empresa Mann India, que cuenta con tres centros globales de desarrollo y que pondrá a la disposición 1.200 ingenieros que trabajarán en forma remota en la adecuación de los sistemas.

Con respecto a la forma de estimar el costo de un proyecto, Sushil Chaudhary, de Mann India, expresó que depende del número de aplicaciones convertidas y de las horashombre dedicadas al proyecto. "Cuando se tiene la documentación de las aplicaciones el costo es menor en comparación a examinar el código de máquina". En cuanto a las tarifas de las horas-hombre de programación, señaló que éstas varían en función de la fecha de negociación.

Contratar servicios externos de programación en estos momentos puede equivaler a un tercio del precio del mercado en el tercer trimestre, además de que será más difícil ubicar esos recursos externos.

De 11 a 24 denominaciones. Está previsto que en un período de al menos seis meses (de enero a junio de 2008) circularán las dos monedas. 24 denominaciones distintas que incluyen a las 11 actuales y las 13 previstas por el Banco Central, entre ellas la puya fuerte y el billete de 100 bolívares fuertes, dijo Pedro Amaral, funcionario del área de sistemas del Banco Plaza.

Amaral coincide con el resto de los especialistas en que, más allá de la adecuación de los sistemas informáticos, hay un importante reto logístico.

"El manejo de efectivo en las agencias bancarias se realizará por fases. Lo más probable es que se asignen taquillas al manejo exclusivo de bolívares fuertes y otras, de bolívares antiguos". Y añadió que se habilitarán taquillas sólo para canje.

El ejecutivo apuntó que la decisión del Gobierno referida a que los nuevos billetes conserven las características de tamaño y tipo de papel que tienen los actuales, es un impacto mínimo en la reprogramación de los cajeros automáticos.

En cuanto a las monedas, acotó, que su uso se va a incrementar de tal modo que para agilizar las operaciones en taquilla los cajeros incorporarán máquinas cuenta monedas, que deben ser calibradas antes del 1 de enero de 2008.

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Fuente: daycohost.com

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