¿Cloud computing, es válido migrar?

Hemos visto acrecentada la tendencia desde el año pasado, acerca del advenimiento de ésta nueva tecnología en el entorno TI. Muchos proveedores se han reconocido en el mercado de "Computación en la nube"  y muchas controversias ha despertado su incorporación, en nuestra región. Sin embargo, varios especialistas coinciden que el cloud computing  o computación en la nube, no es tan complejo, aunque tampoco es tan sencillo de implementar en las organizaciones ni para todas las empresas.

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Amén de que si es una solución que puede reportar grandes ahorros y beneficios, para una empresa, independiente del tamaño del negocio. Para algunos, poco acuciosos, pudiesen comparar la computación en la nube, con los servicios tradicionales de hosting, pero su notable diferencia estriba en que el cloud computing ofrece una cantidad de nuevas prestaciones, alta disponibilidad, uso de los recursos según las necesidades de cada momento y el pago por dicho uso.  Además del tema energético, ya que la computación en la nube, resulta el remedio infalible para erradicar los servidores físicos sobre dimensionados, que no alcanzan a rendir ni siquiera a un porcentaje medio de sus posibilidades. 

Implementar o migrar a un entorno de computación en la nube, pasa por el registro de varias consideraciones. Lo primero es identificar cuáles aplicaciones  deben alojarse en cada una de las plataformas, segmentándolas entre aplicaciones públicas o corporativas. Las aplicaciones públicas son aquellas que dotan a las empresas de la infraestructura necesaria para alojar servicios de uso preferente como son las plataformas de correo o alojamiento web. Por su parte, las aplicaciones corporativas, bajo una plataforma cloud, incluyen soluciones de alta disponibilidad y tolerancia a fallos en el mercado de la conectividad, gracias al ahorro de costos y el gran nivel de madurez, entre estas destacan aplicaciones de CRM, ERP o Sharepoint.

Me permito brindarles, un consenso de las consideraciones, que algunos especialistas de TI, definen para la migración a computación en la nube:  

1 -Descubrir e identificar qué aplicaciones funcionarán mejor en un entorno cloud, público o privado.

2 – Analizar qué capacidad de proceso vamos a necesitar y cuáles son los posibles problemas que nos podemos encontrar (por ejemplo aplicaciones que no funcionen correctamente en remoto.

3 – Migrar: elaboraremos una correcta estrategia de migración, desarrollando test y pruebas que nos aseguren el correcto funcionamiento

4 – Consolidar: una vez realizada la migración, analizaremos los resultados de dicha migración de manera que podamos consolidarla a través de un proceso de mejora continua.

Ahora…¿es realmente válido migrar para una empresa a entorno cloud?

  

Tres principales ventajas destacan, por lo antes expuesto: Reducción de costos. Ya que en la mayoría de los casos  no existe inversión de capital fijo y hay una disminución a su vez de los costos operacionales, propiciado porque el mantenimiento de la plataforma es responsabilidad del proveedor del servicio y no del cliente, y la modalidad de la transacción  es ajustar los gastos gracias al "pago por uso". Flexibilidad. A través de ésta tecnología, las empresas pueden escalar sus recursos de computación, ajustándolos a la demanda y reduciendo a la vez las tareas de mantenimiento y administración de la infraestructura de TI. Fiabilidad. Los servicios cloud son implementados sobre potentes plataformas de computación en alta disponibilidad y gestionados por expertos, certificados en las tecnologías más destacadas del mercado, garantizando mantener la plataforma disponible 24x7x365, lo que asegura que en el caso de fallo de un servidor físico, el servidor virtual no se vea afectado gracias a las prestaciones de alta disponibilidad de la plataforma. Es decir, esto evita que las empresas deban  doblar su inversión en servidores.

Partiendo de que uno de los objetivos del Cloud Computing, es pretender que cualquier empresa independientemente de su tamaño, pueda competir en un mercado global con igual condiciones, que el resto de los actores presentes en su mismo sector. Hasta hace poco, sería impensable antes de haber llegado Internet, que esto fuera posible. Las pequeñas y medianas empresas han podido dejar de actuar localmente para posicionarse a nivel mundial y alcanzar una competitividad que hasta entonces les había estado casi vetada. Desde las aplicaciones móviles, la Web 2.0 y el comercio electrónico y el considerable avance que esto supuso, el auténtico cambio en la mirada de grandes analistas, es el cloud computing y lo que muy pronto, se posicionará bajo el concepto de la "Democratización Tecnológica". 

Mucho camino queda por recorrer para ambas tendencias, sin embargo aunque relacionadas entre sí, propiciarán que la empresa más pequeña pueda disponer de las más modernas infraestructuras y aplicaciones para expandir su negocio.

Según refleja Access Markets International (AMI) en su último informe sobre la adopción de servicios Cloud en el mercado pyme, un 12 por ciento de las pequeñas empresas de todo el mundo y un 24 por ciento de las medianas utilizan ya algún tipo de software como servicio. El mismo estudio prevé que las pequeñas y medianas empresas de todo el mundo gastarán hasta 95 billones de dólares en tecnología cloud, de aquí a 2014.

El Cloud Computing en las pymes, agudiza aún más su rango de acción, lo que se agudiza en ventajas competitivas. En primer lugar, debemos comprender que en las pequeñas y medianas empresas es difícil encontrar un departamento de Sistemas que estudie las novedades del mercado y ayude en su implementación. Gracias al software como servicio y el cloud, la utilización de aplicaciones que, en principio, podrían resultar complejas, se hace más sencilla, lo que permite a la pequeña o mediana empresa olvidarse de cualquier tipo de instalación, soporte o mantenimiento.

Las organizaciones al pagar solo por lo que gastan, los ahorros asociados en infraestructura y la flexibilidad además de la posibilidad de adaptarse rápidamente a cambios repentinos en sus requerimientos, permite a los directivos de las organizaciones trabajar desde cualquier lugar y en cualquier momento, ya que las aplicaciones están disponibles en la web las 24 horas del día y se puede tener acceso a ellas a través de un sinfín de dispositivos: smartphones, PDAs, portátiles, etc. 

Frente a éste alentador escenario, sin embargo aún quedan algunos retos que asumir se hace necesaria toda una campaña de concienciación en las organizaciones, ya que son ellas las que tendrán que confiar gran parte del éxito de su negocio a terceros; en segundo lugar, hace  falta un mayor compromiso de seguridad por parte del proveedor porque al trabajar en red, nuestra información crítica de negocio puede verse comprometida; finalmente, falta tiempo de desarrollo, tiempo para que las empresas puedan acceder a través de la nube a aplicaciones de toda clase.