La inversión en ciencia en el mundo
La inversión en investigación y desarrollo en el mundo. Foto: Nature
El último análisis, basado en datos de los últimos años, de un institución norteamericana sobre la inversión en ciencia confirma que Israel sigue líder en inversión relativa en investigación y desarrollo (I+D) con un 4,7% de su producto interior bruto, más del doble que el promedio de los países de la OCDE. Le siguen Suecia, Finlandia, y Japón con un 3,86%, 3,51% y 3,18% respectivamente.
El primer país en valores absolutos era en 2004 EEUU con una inversión de 340.000 millones de dólares, que supone más que la suma del resto de los países del G8. Aunque esta inversión está declinando en los últimos tiempos representa un 2,57% de su PIB, que está por encima del promedio de la OCDE. De cerca le seguía Alemania con un 2,51%, mientras que Corea del Sur y Suiza con un 2,99% y un 2,93% ya han sobrepasado al gigante norteamericano.
Hay países como China que han hecho un gran esfuerzo en este campo. Este país invierte sólo un 1,34% de su PIB, quedando muy por debajo de los demás, pero gastó en 2005 en números absolutos 115.000 millones de dólares.
Arden Bement, director de la National Science Foundation, afirma que en general los países están invirtiendo en I+D más que invertían antes.
El caso español no es mencionado explícitamente en ningún momento en el informe, aunque aparece en algunas de las tablas correspondientes. Concretamente aparece con un 1,12% de su PIB (dato de 2005, se supone que últimamente ha aumentado) en el puesto 29 y por detrás de, por ejemplo, Eslovenia, China o la República Checa.
En el informe también se analiza el porcentaje de I+D dedicado al desarrollo de armamento y que tiene menos beneficios directos sobre la sociedad (según los redactores del informe). Restando este porcentaje países como Alemania sobrepasan en porcentaje de PIB a EEUU.
Otro indicador interesante es el gasto en I+D en relación a la economía nacional de cada país. En este caso España ocupa el lugar número 15 y le sobrepasan países como Polonia, Hungría, México, Portugal, Argentina, Irlanda o Rumanía entre otros. Este indicador es sugerente porque representa el esfuerzo real en inversión científica realizado por el país de turno. Así, países como Rumanía, con un nivel de riqueza muy bajo, hacen un esfuerzo superior a otros aunque gaste menos en términos absolutos o en porcentaje de su PIB.
En el conjunto de los países de la OCDE se aprecia en las últimas décadas una disminución drástica en porcentaje de la inversión en I+D realizada por los gobiernos respecto a otras instituciones como la industria. Concretamente la inversión gubernamental ha pasado del 20% del total en 1981 a menos del 10% en 2004.
El informe hace un desglose por sectores. Así por ejemplo en tecnologías de la información gana Finlandia seguida de Irlanda y Corea. España se sitúa en el puesto 17 en este apartado.
Si sólo se considera la inversión en I+D realizada por las instituciones académicas, en el primer lugar se sitúa Turquía, y en este caso España llega al noveno puesto. Este indicador obviamente refleja la debilidad del sistema I+D fuera del ámbito académico.
El informe es bastante profundo y mucho más extenso de lo relatado en este artículo, analizando muchos factores. Aunque está redactado para «consumo doméstico» de EEUU permite extraer algunas conclusiones interesantes.
Para mayor información, vea el informe completo de la NSF.
Fuente: neofronteras.com