Tecnología

Esterilización sin residuos de radiación

La radiación gamma produce ionización. La ionización actúa interrumpiendo los procesos que conducen a la descomposición de las substancias orgánicas. Su función es hacer no viables los microorganismos rompiendo las cadenas del material genético del núcleo.
 
A su vez las levaduras y otros tipos de hongos son destruidos, y los parásitos, insectos, sus huevos y larvas son inactivados o vueltos estériles.
 
La radiación gamma proviene del cobalto 60, no afecta los núcleos de los átomos de los elementos que se irradian y por lo tanto ningún producto tratado puede activarse de manera tal que se pueda volver radiactivo.
 
El tratamiento con radiaciones gamma es un método físico utilizado para lograr la esterilización de materiales empleados en el cuidado de la salud, para la descontaminación de alimentos, de materia prima y productos industriales, además de otras aplicaciones.
 
El servicio de esterilización que proporcionamos consiste en someter los productos a un campo de radiación gamma proveniente de una fuente de cobalto 60. Las aplicaciones industriales más relevantes de las radiaciones ionizantes son:
 
• Irradiación de productos desechables de uso médico.
• Irradiación de productos herbolarios y especies.
• Irradiación de productos farmacéuticos.
• Irradiación de alimentos
• Irradiación de cosméticos.

En la planta de Pegamma un sistema automatizado de cintas y correas trasladan los productos dentro de unos vagones de aluminio hasta las fuentes que emiten los rayos gamma. Esta última es una placa que mide cerca de 1 x 2 metros, y que contiene varios lápices de Cobalto 60, responsables de generar los rayos gamma. Los productos giran alrededor de la fuente de Cobalto 60 y son expuestos el tiempo necesario establecido de acuerdo a la contaminación inicial del producto y del nivel de calidad que se quiera alcanzar.

 
Como el poder de ionización y penetración de los rayos gamma es muy alto, la radiación puede pasar a través del empaque del producto y del producto mismo, llegando hasta los microorganismos que se encuentran en el interior. Esto da la posibilidad de poder esterilizar los productos en su empaque final. De esta manera se puede controlar la esterilidad pues no se requieren operaciones posteriores en las que los productos puedan llegar a recontaminarse con microorganismos y no se requiere de cuarentena.
 
Controlando el tiempo de exposición del producto a la radiación se pueden eliminar insectos, hongos, levaduras, bacterias y virus.
 
Es un proceso en frío ya que no incrementa significativamente la temperatura de los alimentos procesados, por lo cual se mantienen más frescos que con otras técnicas.
 
No deja residuos tóxicos,, no deja trazas de radioactividad. Al aplicarse en el empaque final, previene la contaminación bacteriana posterior.
 
Ing. Paolo Traversa – Gerente PEGAMMA
58 212 5041582 – ptravers AT ivic.ve / Gaceta Botica Nro.5.

Fuente: Ing. Paolo Traversa – Botica

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